jueves, 10 de febrero de 2011

LEY 581 DE 2000 (LEY DE CUOTAS)

Por una POLÍTICA CIUDADANA en el Cesar, donde las mujeres, los jóvenes profesionales y los líderes tengan cabida...

Según la Ley 581 de 2000 o “Ley de Cuotas”, el Presidente de la República, los Ministros, Directores de Departamento Administrativo, Superintendentes, Directores, presidentes o gerentes de entidades descentralizadas, Gobernadores, Alcaldes, y demás nominadores de los órdenes nacional, departamental, distrital y municipal, y/o quienes reciban por delegación estas funciones deben asignar el 30% de los cargos de libre nombramiento y remoción pertenecientes al nivel directivo a mujeres. De igual forma, cuando los cargos se deban proveer por el sistema de ternas, deberá incluirse por lo menos el nombre de una mujer y también, que las mujeres deben estar representadas mínimo con el 30% en los cursos y seminarios de capacitación que se ofrezcan en el exterior a los/as servidores/as públicos/as en todas las áreas y en las delegaciones de colombianas y colombianos que en comisiones oficiales atiendan conferencias diplomáticas, reuniones, foros internacionales y comités de expertos/as, entre otros.

Nos dice la Ley de Cuotas que cuando la autoridad nominadora, ante una vacancia o nuevo cargo, no nombra el 30% de mujeres mínimo exigido (El 30 % de mujeres es un mínimo y no un máximo), se estaría incumpliendo la ley, lo que constituye causal de mala conducta, que será sancionada con suspensión hasta de treinta (30) días en el ejercicio del cargo y con la destitución del mismo en caso de persistir en la conducta, de conformidad con el régimen disciplinario vigente.

Sin embargo hemos observado de manera sistemática como la Ley de Cuotas no se cumple en Colombia y tampoco en nuestro departamento del Cesar. En el mundo, Colombia ocupa junto a Congo, el puesto 113 en materia de participación de mujeres en política, en una lista de 134 países.

Pero todo éste panorama de inequidad de género empieza a cambiar, de manera lenta pero firme. Entre los “Objetivos del Milenio para 2015”, Colombia se trazó como meta y aceptó cumplir con brindar participación a las mujeres en un 30% en todos los cargos sin discriminar alguno de ellos; por ello, la bancada de mujeres del Congreso solicitaron fijar la participación de mujeres en un 30% también en cargos de elección popular; siendo ésta una de las excepciones que hasta el 27 de octubre del año en curso contenía la Ley de Cuotas.

El día 27 de Octubre, dentro del debate que los congresistas dan al estatuto que desarrolla la Reforma Política que regirá las elecciones de 2010; se aprobaron sus primeros 15 artículos de los 41 que contiene el proyecto. Ésta ley estatutaria estará lista en las próximas semanas y empezará a regir antes de las elecciones al Congreso. Entre los puntos aprobados, está la que establece que las listas al Congreso deberán incluir como “MÍNIMO” el 20% de mujeres en el caso de la Cámara de Representantes y el 30% en Senado. Estas proporciones no satisficieron plenamente a la bancada femenina, quienes solicitaban el 30% argumentando los Objetivos del Milenio, la necesidad de equidad de género en la participación en el mercado laboral donde Colombia fue pionero en América Latina y por la imperante necesidad de que las mujeres luchen por la defensa de sus derechos políticos y sociales.


Sea como fuere, lo aprobado cambia completamente el panorama político en toda Colombia, donde el género masculino ha sido predominante al aspirar y al resultar electos en cargos de elección popular. En el caso específico del Departamento del Cesar, de cuatro (4) curules en la Cámara de Representantes a que tenemos derecho por nuestra población, una de ellas, indefectiblemente será para una mujer. Así que ya la lucha política entre los hombres se limitará a obtener las tres (3) curules restantes y no las cuatro (4) existentes como venía ocurriendo. Al ser esto Ley, su aplicación es de estricto cumplimiento, y las garantías para las mujeres son mayores.

Consideramos que ya es hora que las mujeres cesarenses, que representamos aproximadamente el 55% de la población del Cesar, empecemos a ganar estos espacios desde donde podremos luchar por la satisfacción de las necesidades básicas de nuestros pueblos. Según estudios, las mujeres somos más dedicadas, más comprometidas, más responsables, más honestas, más temerosas porque pensamos en nuestros hijos y hogar más que los hombres al momento de tomar decisiones. Se ha comprobado además, que generalmente son las mujeres quienes luchan por los derechos de las demás mujeres con vehemencia y convicción, siendo ésta población la más vulnerable a la violación de derechos en todos los roles en los cuales nos desempeñamos.

Luz Marina Gnecco Plá

No hay comentarios:

Publicar un comentario

Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.